7.6.07

Enfermedades


Yo no sé si voy a poder seguir viendo House. Siempre he sido un pelín hipocondríaca (algunos dirían que mucho) y se me ha dado bien lo de buscar síntomas de enfermedades primero en el Vademécum y luego en Internet. Hubo una época en la que estaba convencida de que tenía la tenia e incluso tenía localizada la cabeza en la tripa (había una zona un poquito más abultada a la izquierda de mi tripa, supongo que por eso de que no somos simétricos). Tal era mi convencimiento de tenerla que se lo contaba a todos mis amigos y amigas y todos miraban el bulto de la cabeza y movían la cabeza o bien en sentido afirmativo (los que me creían) o bien en sentido negativo (los que pensaban que se me estaba yendo la cabeza). Mi padre insistía en que fuera al médico pero dado que a mí no me molestaba y, sobre todo, porque mi abuela me contó como mi abuelo – que sí la tuvo – se tuvo que deshacer de ella, decidí que éramos más felices juntas que separadas.

Una vez que me pillé el dedo con una puerta y se me puso morado, negro y asqueroso, tuve que mirar en Internet lo que era la gangrena y - ¡oh, dios mío! – casi palmo del susto. Aprendí que existía la “wet gangrene” y la “dry gangrene” (se busca mejor en inglés que hay mucha más información de estas cosas médicas) y que cualquiera de las dos podían suponer una amputación incluso si te dabas cuenta a tiempo, así que dos días más tarde del accidente me fui a las urgencias de La Paz asustada por el color y el dolor de mi dedo. Obviamente no me atreví a decirle al médico que uno de mis miedos era tener gangrena no fuera a ser que se riese demasiado de mí.

En el capítulo de House de este martes una pobre mujercita muere por una infección de no-sé-qué-cocos que entró en su organismo por una herida provocada por el cierre del sujetador. Es verdad que en una situación normal no hubiera muerto pero el diagnóstico fue erróneo porque la punción lumbar (donde según he podido deducir se ve si tienes una infección o no) salió limpia y le dieron radioterapia porque creían que tenía cáncer, lo que destruyó las defensas de la mujercita. Pero es que si House yerra en el diagnóstico, ¿por qué no le iba a pasar al médico de La Paz que es mucho menos guay? Desde el martes, no he parado de vigilarme el arañazo que me hice hace un par de semanas con una papelera de metal. Y eso que está prácticamente curado.

Creo que para no estar todo el día preocupada por los ictus, los lupus y las contaminaciones ambientales, sería mucho mejor dejar de ver House.

4 comments:

Anonymous said...

jajajajajaja

Genial este post.

A mi conseguiste convencerme de que la tenia estaba ahí, lo peor fué el día que lo conté en mi casa, como se rieron de mi, y de ti claro.

aneninen said...

vaya, que suerte, pensaba que sólo me pasaban a mi estas cosas... yo HOUSE no me lo puedo permitir, tampoco. Sólo lo ví una vez y aunque lo encontré interesante, no es saludable para mi tranquilidad.
Bueno, pero más vale ser así, para prevenir, no?
Salud!

Iris Riesgo said...

jajajajaja, lo de la tenia me ha matado, no puedo ni respirar... Madre qué loca estás. Yo al menos "sólo" soy aprensiva, vamos, que exagero lo que tengo, pero debe haber una base clara de que sufro algo de verdad y no inventado. Muá.

SuzieMoi said...

Yo tenía mis síntomas... Lo que pasa es que eran poco literarios, Irix.

Puga, eso sí que debió ser bueno.

Aneninen, sí, mejor preocuparse un poco.

Besoos